Cuando llega el momento de tener que renovar el mobiliario de una cocina, cada vez son más las opciones disponibles en cuanto al diseño, donde se puede experimentar con colores, texturas, materiales o incluso con los electrodomésticos.
Lo que es cierto es que cada día, un mayor número de usuarios, además de tener en cuenta los aspectos de distribución y decoración de la propia cocina, se fijan más en la eficiencia energética y la capacidad de los electrodomésticos presentes en la estancia.
Por este motivo, en esta entrada, nos centraremos en analizar y comparar las similitudes y diferencias que existen entre dos modelos distintos de fuegos. Compararemos las cocinas de inducción y las que emplean gas como combustible, viendo, además, sus ventajas y sus inconvenientes.
Beneficios e inconvenientes de las cocinas de inducción
Presentan gran eficiencia energética
Cuando se trabaja con placas de inducción, una de sus principales ventajas es el gran aprovechamiento de la energía que permiten, puesto que prácticamente la totalidad de la energía que consumen es aprovechada para su labor, sin que existan perdidas innecesarias.
Es por este motivo que cada vez en más hogares de nuestro país podemos encontrar este tipo de sistemas.
Su funcionamiento se basa en la creación de un campo electromagnético, de forma que aplican el calor solamente donde se coloque el recipiente, de manera que, si este se separa de la superficie de la placa, esta deja de emitir calor, permaneciendo en stand by hasta que se vuelva a detectar un objeto apoyado sobre la superficie.
De este modo, se evita un malgasto de la energía, puesto que solo trabajan de manera útil, reduciendo en gran medida el consumo de energía eléctrica.
El precio de la luz actualmente es variable y elevado
Estas cocinas de inducción utilizan energía eléctrica para su funcionamiento, siendo esta energía la que presenta un mayor precio en la actualidad, ya que el precio a pagar por el kWh de luz se ha incrementado en más de un 65% durante este último año.
Esta subida del precio de la luz, es sufrida de manera directa por los consumidores del mercado regulado de energía, pues cuentan con la tarifa PVPC (Precio Voluntario al Pequeño Consumidor) como única alternativa, por lo que la exposición de estos usuarios a las fluctuaciones de precios es mayor.
Por este motivo, actualmente es más recomendable optar por el mercado libre de energía eléctrica, donde la selección de la empresa con la que trabajar y la tarifa a aplicar las decide el consumidor.
De esta manera, podremos encontrar la mejor tarifa de luz en base a las demandas de consumo que se presenten de forma real, representando mejor opción que las condiciones de la tarifa PVPC, ya que el precio de la energía es fijo y pactado de manera previa a la celebración del contrato, sin que existan fluctuaciones diarias del precio.
Beneficios e inconvenientes de las cocinas de gas
La opción del gas es más económica y permite conservar los alimentos mejor
Las cocinas que utilizan el gas como fuente de alimentación permiten controlar de manera más o menos precisa la temperatura del fuego sin necesidad de desperdiciar energía.
Además, esto supone mejores resultados en cuanto al sabor y mantenimiento de las propiedades de los alimentos, según los expertos, puesto que, al aportar el calor de manera constante y directa, permite mantener mejor las propiedades alimenticias.
El uso de estas placas de gas, representa una cocina más sostenible y cuidadosa con el medio ambiente en comparación de las cocinas eléctricas o las de butano, lo que en el aspecto económico se traduce en un ahorro en las facturas de suministros mensuales.
Esto se debe a que además de consumir menos energía que las placas eléctricas y no malgastar electricidad con calor residual, el precio del gas en la actualidad es significativamente menor que el de la electricidad.
Además, la gestión de contratar gas natural en un inmueble es realmente sencilla si la vivienda no cuenta con este servicio activo, pues simplemente debemos elegir la comercializadora de gas con la que se quiere trabajar, seleccionar una tarifa disponible y esperar un plazo de entre 5 y 7 días a que un técnico instale y active el contador del suministro.
Su limpieza es más compleja y presentan el riesgo de fugas
A diferencia de otros modelos de cocinas donde la superficie es completamente plana, estos sistemas se componen de hornillas de hierro y demás componentes, lo que se traduce en un mayor tiempo de limpieza del sistema.
Además, no debemos olvidar que se cuenta con el riesgo de fuga de gas, pese a que supone un riesgo mínimo y muy poco probable, la cocina deberá contar con una buena ventilación y cumplir con las revisiones periódicas establecidas.
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