Antes de lanzarnos a diseñar el proyecto de nuestra futura cocina es importante que nos planteemos algunas cuestiones como:

¿Quiero mesa grande en la cocina? ¿O prefiero una más pequeña? ¿Abro la cocina al salón? ¿Incluyo o no incluyo la zona de lavadero? ¿Qué electrodomésticos necesito? ¿Los quiero vistos o integrados? ¿Qué capacidad de almacenaje necesito?

En función de las respuestas que demos a estas preguntas el diseño de la cocina será muy diferente. En este post profundizaremos sobre algunas de las cuestiones más importantes.

Triángulo de actividad

Este va a ser común en todas las cocinas. Resulta fundamental para que el trabajo en nuestra cocina sea cómodo y funcional. El triángulo de trabajo está compuesto por la zona de frío (frigorífico), fregadero y zona de cocción (placas). Si la cocina es pequeña mínimo tendrá que haber una distancia de 600 mm (estándar).

Forma de la cocina

Si tu cocina es pequeña te recomendamos una L sin sobrecargar demasiado de muebles el espacio. Para cocinas largas una línea es la mejor opción. Y solo si tu cocina es bastante amplia te recomendamos que optes por la isla.

La península la podremos considerar cuando mi cocina sea lo suficientemente ancha, dejando un pasillo entre muebles de más o menos un metro de distancia.

Cocina abierta al salón

La tendencia es abrir la cocina al salón con el fin de socializar y poder compartir momentos con nuestros familiares y amigos. Además, conseguirás una mejor iluminación y ampliar el espacio.

Iluminación

Si tenemos la suerte de tener una ventana por la que entra mucha luz a la cocina, debemos aprovecharla, o bien para la zona de trabajo o para situar la mesa para comer si hemos decidido colocar una. Si a la zona de trabajo de la cocina llega menos luz natural, una muy buena opción es integrar tiras de led en los muebles. Así conseguiremos una iluminación directa y muy bonita para cocinar cómodamente.

Zona de lavado

Nosotros te aconsejamos que en la medida de lo posible no incluyas la lavadora/secadora en la cocina. Evitarás malos olores o posibles manchas en la ropa y además tendrás un mayor espacio de almacenaje para tus utensilios de cocina.

Si no dispones de un cuarto para poder colocar la zona de lavado, nuestra recomendación es que incluyas la lavadora integrada en los muebles. Es la opción más práctica y de esta forma cuidarás la estética de la cocina.

¿Mesa en la cocina o en el salón solo?

Aunque no lo creáis esta pregunta es importante. Si vivimos solos o con nuestra pareja y no tenemos una cocina demasiado grande, la mejor opción es optar por una barra o península pequeña y colocar la mesa en el salón. De esta forma desahogarás la cocina y podrás tener una mejor circulación por ella.

Electrodomésticos

Dependiendo de los colores y acabados de nuestra cocina, decidiremos si integrar o no los electrodomésticos. En la mayoría de los casos elegimos un acabado inox, que encaja y decora perfectamente cualquier cocina. Pero si hemos utilizado varios acabados, colores o texturas quizá no queramos añadir un extra. En ese caso los integraremos para cuidar la imagen de la cocina. De esta forma quedará más elegante y limpia.

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